martes, 1 de junio de 2010

Yo soy otra letra

Cuando R llegó nos estuvimos descojonando un buen rato de sus gafas de sol. En general, llevaba unas pintas de lo más normales. Quizás por eso el efecto de las malditas gafas. Él era así, ya sabes, siempre intentaba innovar, hacer cosas nuevas... ¡pero su desidia era casi tan grande como las putas gafas! Oh, joder, qué gafas. ¡No podíamos levantar la tripa del suelo por el dolor que nos habían provocado las carcajadas!

Cuando conseguimos ponernos serios hicimos el intercambio. En los intercambios siempre hay una bolsa que pesa la hostia y otra que no pesa nada. Nosotros siempre nos llevábamos de vuelta las dos, así que esto era algo que nos importaba un bledo.

Al ver los dos cadáveres, R se estremeció y empezó a temblar.

-Tampoco hace tanto frío, chico- dijo J, mi compañero.

De repente algún pájaro le cago a R en el hombro. J soltó una carcajada.

-Pero ya sabes lo que dicen. Cuando el grajo vuela bajo...

lunes, 12 de abril de 2010

Rambla abajo

Hay domingos que existen. Los señores llevan a sus mujeres del brazo a la salida de la iglesia o el campo de fútbol. Van a un café de los de antes, como en el Bilbao de nuestros abuelos. En la calle el tiempo acompaña y los problemas, que compartidos son menos problemas, pasan a un segundo plano. Mañana solo será un día que no recordaremos la semana que viene.

Ahora sé que simplemente hacía falta una mujer para sentirse parte de todo esto.

martes, 16 de marzo de 2010

Debes mirarte esas manchas

El restaurante estaba lleno y había un respetable -por la edad- señor gordo que fumaba un auténtico habano. La verdad es que ya no se veían muchos de esos... Cuba y el s.XXI, ya se sabe. A simple vista, eso era todo lo que cabía destacar en el aquel comedor.

En una de las mesas se sentaban Charlie y ella. Diez años juntos, sin hijos y por tanto con dinero. Ella estaba nerviosa.

-En verdad siempre estás nerviosa -gruñó Charlie.

-No estaría tan nerviosa si a la mínima no estuvieras filtreando con todos los culos 15 años menores que el tuyo que te encuentras a lo largo del día -se quejó ella.

-Cariño. No empieces otra vez con eso. Y ahora... feliz aniversario -chocó su copa con la de ella.

-¡Vete al cuerno!

Charlie se levantó y se ausentó durante 10 minutos.

-¿Dónde te habías metido, cerdo cabrón? -gritó casi entre dientes.

Charlie únicamente le miró y después se sirvió otro poco más de vino. Parecia exhausto. Ella seguía hablando.

-¡En mi puta cara! Delante de mis narices estabas viéndote con otra y yo aquí sentada -miró alrededor en todas las direcciones-. ¿Quién es? ¿Dónde está la maldita zorra?

-No montes una escena -rogó él.

-No montaría ninguna escena si no fueras un maldito mentiroso, salido y asqueroso cabrón -dijo dejando su servilleta en la mesa.

Charlie se levantó.

-¿Quieres saber dónde estaba, verdad? -gritaba.

Ella le miró desafiante.

-¡Estaba cagando, maldita sea! ¡Estaba en el jodido cuarto de baño!

Todo el restaurante estaba en silencio pero nadie miraba más allá de su plato de comida.

-Maldito asqueroso... -susurró ella. Estaba abochornada.

-Y ahora ponte el abrigo. Nos vamos.

Charlie pagó y se despidió del maitre rogándole disculpas por el comportamiento de su mujer. En el coche no dijeron una palabra pero ella había aprendido algo aquella noche: al menos de puertas para afuera, era mejor mentiroso y limpio que asqueroso y bienhechor.

jueves, 11 de marzo de 2010

I Want You

Todos se han marchado, los ángeles se han ido a dormir, los diablos a la tele y los demás están haciendo su vida. Solo quedamos algunos hombres buenos. Old young boys diría.

Es jueves y son las 11 de la matina. Habrá que hacer algo...

lunes, 1 de marzo de 2010

Made in Taiwan

Para ser 1995 no iban tan rematadamente mal vestidos. Habían pasado los últimos dos meses bebiendo vodka con zumo de limón natural. Eso era todo lo que compraban: vodka y limones. Ocasionalmente se dejaban invitar a comer por alguien con quien trababan amistad pero la mayoría de veces engullían los bocadillos de fiambre que sobraban al final del día en el bar donde bajaban a comprar tabaco.

Durante el tiempo en que habían convivido habían sido de todo: delincuentes, amantes, buenos, malos, amigos, hermanos... Los recuerdos eran interminables. La vez que robaron chocolatinas para toda la semana en una gasolinera a medianoche o los intentos fallidos de suicidio asistido serían seguro cosas que difícilmente olvidarían.

Sin embargo, tenían que separar sus caminos. Los dos sabían que cuando el vodka grita es momento de volver a casa a una vida corriente por un tiempo y descansar.

Así que allí, en el lugar donde creían haberse encontrado la primera vez, se despidieron dándose un abrazo e intercambiándose sus camisetas como hacían los futbolistas.

-Nos volveremos a ver en el futuro. En alguna red social.

-Claro. Cuídate mucho

lunes, 22 de febrero de 2010

Penélope

De repente solo debes algo de dinero, escribes en segunda sin que te importe una mierda y escuchas a Leonard Cohen decir todas esas cosas con una sonrisa. Me da igual que sea recurrente. He vuelto a citar a LC.

viernes, 19 de febrero de 2010

¿Ya tienes tu Cartier?

Pasan por la vida con pena y dos glorias que tratan de magnificar con todos los medios a su disposición. Su infancia se rompe entre quebraderos de cabeza paternos y solicitudes renegadas de colegios más elitistas. Mamá siempre está demasiado estresada como para enseñarles a meterse la camisa por dentro y atarse los cordones. A cambio reciben unas clases de tenis. Y refuerzo de inglés, nociones básicas de francés, algo de matemáticas y catequesis. Y padel, vela y golf. Y dos hermanitos más.

En Secundaria llega un día en que deciden hacerse mayores y en la discoteca para menores fuman por primera vez. Además las cosas no van bien en clase. Siete pencos... y euskera. Y en casa no están por la labor de que estropeen el curso por culpa del euskera... A la mañana siguiente hacen públicas sus primeras manifestaciones en materia política en la hora de tutoría. Esa en la que los profesores pierden la vocación.

Bien, así que aquí estamos. A punto de cumplir los 18 años y solo tienes una cara bonita. Todos tus conocimientos son acerca de maquillaje y no hay mas que verte por las noches... De todas formas veremos que es lo que podemos hacer.

lunes, 8 de febrero de 2010

I`m your man

Aunque pueda parecerlo, quiero ser un hombre de verdad. Y eso no se consigue siguiendo ninguna pauta pre-concebida. Se llega a ser. En algún momento dejé de tener vergüenzas adolescentes, le dije a un amigo que le quería -sin decírselo- y llamé yo a mis padres porque estaba preocupado.

Creo que en noches como la de hoy compartiremos sendas copas de vino -de diferente diseño- y reflexionaremos sobre lo horrible que es el mundo y lo bonito que iba a haber sido. Aunque tú seguro que lo verás con mejores ojos que yo. Pero ni tú vas a dejar de quererme por esto, ni yo voy a encerrarme en ningún sitio.

Entonces, cuando de alguna manera demos por terminado el tiempo que tú concedas para planteamientos pesimistas con un beso que nos libre de "tequieros" rutinarios, lloraré durante unos segundos. Porque sí, por todo y por nada. Delante de todos pero solo debajo de tí.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Que todos conocen

Nos imaginé a todos en algún lugar por debajo del suelo, mal-cantando "Presos de Nuestra Libertad" y tatuándonos los unos a los otros nuestras frases favoritas en el brazo. Era sincero. Cualquiera se habría partido la cara por salvar el honor del que se sentaba a su lado. O el honor de las mujeres que nos habían abandonado.

A veces ser un hombre tiene las dos caras malas de las dos monedas: eres hombre y además varón. Hombre. Y eso implica una serie de mecanismos de defensa mútua y códigos maradonianos que cuesta romper. Somos así.

domingo, 31 de enero de 2010

Dance me to the End

Mientras todos nosotros pasamos frío, estudiamos para nada, dejamos pasar trenes, oportunidades y noches. Cerramos puertas a un futuro mejor, matamos un árbol cada vez que hacemos un problema mal. Mientras nos quedamos parados viendo como terminan con el fútbol, el Rock y las peores costumbres. Ni siquiera hay algún político un poco dandy. Ni uno que sea un poco poeta. Ni uno.

Mientras todos nosotros echamos a perder en general, Leonard Cohen está haciendo lo que realmente le sale de los cojones. Gracias.

miércoles, 27 de enero de 2010

Pegatinas de gigantes américanas en guitarras de imitación de origen coreano y un lema que se desdice

"Lo que hay en el mal gusto, es el placer aristocrático de desagradar." Voy a empezar a leer a Baudelaire. No lo voy a leer porque tenga fama entre la gente puesta. Y no quiero que, si lo has leído, me digas lo sublime que es. Y menos si vas a decir "sublime" una vez más. Reconoce que no sabrías dar una definición formal de ese término que tan bien te suena. ¿Tus gafas son de verdad? Son demasiado ridículas para serlo... Es mi opinión. No, no soy yo quien se ha olvidado de quién soy. De verdad, ¿no pretenderías que te diera la mano, no? Sois mierda. Igual que ellos.

No iba a quedarme callado escuchando tus barbaridades sobre el sentido de la vida. No las tuyas, al menos.

miércoles, 20 de enero de 2010

Las dos cosas

Vamos a hablar del veneno. Siempre recuerdo -hasta que se me olvida- que uno nunca debe tomarse demasiado en serio. Ya si lo hacen terceros es cosa de ellos y de que el ego sepa distinguir mierda entre más mierda. Pero siempre hay que tener en la cabeza que uno es menos de lo que da a aparentar. Hasta que lo olvidas un segundo y -vaya que sí- lo pagas.

Voy yo también decidiendo si soy bueno, malo, loco o peligroso. Las quiero todas.

lunes, 18 de enero de 2010

Metro de las 22

Si somos quienes somos es por lo que hicimos antes de llegar hasta aquí. Siento siempre una gran nostalgia de nuestra adolescencia quinceañera. Cada fin de semana, cada sabado era una experiencia nueva. El descubrimiento de algún secreto de la vida. Los bares, el alcohol, la fiesta...
Nos recuerdo entrando en Luzarra, de noche en invierno y aún de día a partir de abril, con los ternuas de por entonces, los granos en la cara y las canciones de Marea. Me duelen muchas de esas canciones y me derrumbo viendo fotos de aquel entonces.

El Casco Viejo, el Athletic de Valverde, BilboRock...

Hemos vivido. Y parece que seremos la última generación que lo haga. Os quiero.

domingo, 17 de enero de 2010

La sombra del Txopo

Nene, tenías que entender que en todos los campos no iban a insultarte sólo a la salida del bus. Hay estadios de esta Liga en las que no vendemos el fútbol, nuestro equipo, a la prensa especializada. De verdad somos del equipo de nuestra ciudad, del de nuestros abuelos y de nuestra sangre.

Mamá debe estar contenta. Pero eres tú quien ha elegido todo esto. Aplaudimos a los fútbolistas de oficio. Los que se dedican a jugar.

miércoles, 13 de enero de 2010

Definición rimbombante #214

A veces me he sentido un poco pequeño. Tan poquita cosa en un lugar tan grande. Nadie va a entender el mundo nunca. Sólo tenemos definiciones rimbombantes y momentos oscuros. No sé qué quiero pero sé lo que no quiero. ¿No? Y no quiero un poco más ni últimos esfuerzos. Igual quiero que me saquen el hombro de sitio.

Es mentira que haya diferentes caminos. Todo es una plaza infinita.

lunes, 11 de enero de 2010

Sweer Caroline

Existe el cielo. Hoy he abierto la puerta de uno de mis bares y lo he visto. Ambiente cargado, una iluminación casi tan familiar como la de mi propia habitación. Las baldosas que ya puedo dibujar en mi mente sin dificultad. Quizás eche en falta el más famoso -pero desapercibido- de los letreros de oficio. "Hay caldo. Salda dago".

Vamos, hombre. ¿Quién quiere California, joder?

jueves, 7 de enero de 2010

Hay días para quedarse a mirar

Siempre sois los mismos en los mismos asientos. Levantando la cabeza cada vez que escucháis llegar a alguien sólo para comprobar si es quien calculáis que suele llegar a esas horas. Mirando a todos lados cuando suena un teléfono que ya sabéis por donde ha sonado. Tenéis todos los artefactos inventados para ayudar a estudiar y aún así os salís afuera cada 40 minutos.

A veces la idiosincracia de una nación es perenne. Hay días en que hay poco para ver...

miércoles, 6 de enero de 2010

Tú en tu casa

Recuerdo que hicimos de ellos una forma de humor, una forma de reírnos de alguien sin sentirnos culpables. Eran ellos. El último formato de gilipollas. Y estaban en Bilbao.

Venían a nuestros conciertos y, sobre todo, a los de los demás. Nunca ví uno fuera de la Calle Ripa o del callejón del Billy Pool. Nuestro amigo -y hermano- y yo lo recordábamos estas vacaciones como si hubiera corrido una generación. Y es que ya estamos un poco fuera. No vamos a chupar la polla a nadie a estas alturas, ¿no?

Y en estas ayer encontré una de estas en nuestra guarida. Donde nosotros. Qué mal cuerpo. ¿Qué hacías? ¿Y vosotros?

Tenéis una edad, cojones.

domingo, 3 de enero de 2010

Rebelde sin Causa

James Dean murió poco después de grabar para la siempre coherente nación norteamericana un anuncio de TV rogando precaución al volante. Lo irónico es que se dirigía con su Porsche a una carrera ilegal en la que participaría y, cosas del destino, nunca llegó a tomar la salida.

Caprichos de la vida, el conductor del remolcador del coche destrozado del bueno de James murió en la realización de la ardua tarea. Igual que muchos de los morbosos que compraron piezas por separado del vehículo después del siniestro. Por no hablar de la misteriosa desaparición de una reconstrucción del modelo original que se mostró al público varios accidentes después.

Para mayor asombro, el acompañante del actor en el trágico suceso murió en un nuevo accidente de tráfico en 1981.

¿Qué me venías diciendo de Paul McCartney?

sábado, 2 de enero de 2010

Estudiantes de Medicina bebiendo Red-Bull

Después de que en 1966 Dylan cantara que estaba lloviendo desde el principio pero que él se estaba muriendo de sed, todos tendríamos que haber bajado la cabeza y no escribir una sóla palabra más. Pero somos caprichosos, egoístas y demasiado orgullosos. Es hora de recuperar las guitarras.

El año que recién se ha ido, y que tanta nada me deparó, se queda atrás. Púdrete. Este año hasta tengo propósitos. Por primera vez.